La Asociación de Institutos de Enseñanza Privada de la provincia de Buenos Aires (AIEPBA) solicita “pública y abiertamente” al gobierno bonaerense que “revea la adhesión a la medida nacional” que suspende las clases del 19 al 30 de abril a la vez que “invita a todos a preocuparse por la educación de quienes hoy son el futuro de nuestra sociedad”.
“Si bien informamos de situaciones relacionadas con positivos, aislamientos y contactos estrechos, siguiendo una política institucional de transparencia, desde que se iniciaron las clases presenciales las estadísticas oficiales indican que la escuela no es un foco de contagio. Toda manifestación de la pandemia tuvo origen fuera de las aulas”, dijo el secretario Ejecutivo de la entidad, Martín Zurita.
“Respetamos todas las corrientes de pensamiento pero como educadores debemos sostener que nuestros niños y adolescentes se encuentran inmersos en procesos pedagógicos que necesitan un mínimo de presencialidad. La escuela no puede cerrar porque los contiene emocionalmente y los socializa de manera cuidada”, indicó.
Al mismo tiempo, Zurita aseguró que la “llama mucho la atención” que la suspensión de las clases presenciales se tomó “el mismo día en que el ministro de Educación de la Nación Dr. Nicolás Trotta manifestó que las estadísticas demuestran que las escuelas no son un lugar de contagio, en coincidencia con el Consejo Federal de Educación; posturas que apoyamos plenamente”.
“Que esta medida permanezca en el tiempo con las consecuencias que ha tenido y tendrán sobre las generaciones más jóvenes, depende de la sociedad civil”, finalizó Zurita, directivo de AIEPBA, que representa a una importante red de instituciones privadas ubicadas en la provincia de Buenos Aires.