En Comunidad Profesional Gabriel Pereyra, miembro de la Asociación de Recursos Humanos de Argentina (ADRHA) y CEO de Modobeta se refirió al salario emocional y su impacto en el desempeño laboral.
Señaló que el salario emocional es “todo aquello que no es dinero, no es retribución económica en billete que rodea a un puesto de trabajo, a un colaborador”. Y agregó: “Básicamente la gente trabaja por dinero, buscamos una compensación económica pero la mayoría de las veces no es solo eso sino todo lo que rodea el trabajo, la satisfacción, el placer que te da hacer una tarea, la comodidad, el confort que sentís, el clima laboral en el que estás, cuánto te entusiasma lo que haces. Todo ello que rodea el trabajo se llama salario emocional”.
Aunque aclaró que hablar de salario emocional en un contexto inflacionario tan grande como el que tiene nuestro país resulta complejo.
Desde hace un tiempo que se viene trabajando en esta idea. Pereyra resaltó que está demostrado que las compañías que logran un equilibrio en lo que es la remuneración económica y un muy buen desempeño en lo que es salario emocional, son más productivas. “Lo cual es lógico porque si la gente está contenta, se siente bien, incentivada y por supuesto que es mucho más productiva, comprometida”.
Mencionó algunos ejemplos, como los beneficios que no son solo la prepaga y el gimnasio, sino todo lo que logras por trabajar en una compañía determinada, es lo que se llama “la propuesta de valor”, cómo es el liderazgo, cómo la gente es reconocida, cómo gestiona el clima una compañía, cómo es la relación entre los colaboradores, con los jefes, actividades de integración.
Por otra parte, sostuvo que “uno de los problemas que en muchas compañías se ve es que sus directivos ponen demasiado énfasis en lo que es salario emocional pensando que con solo eso está bien. La verdad que no. Hay que hacer un equilibrio entre compensación económica y el componente emocional”, manifestó en el programa que se emite los viernes por FM Classique 106.5.
Concepto de individualización
Hasta hace unos años desde el área de recursos humanos se trataba a todos los empleados por igual y para todos lo mismo, pero desde hace un tiempo está demostrado que eso no funciona más. “Hoy está el concepto de personalización o individualización en donde tenés que tratar a los empleados o colaboradores de la forma más individualizada posible porque no todos somos iguales”, expresó.
Además, se refirió a estudios y publicaciones, que indican que las compañías donde el clima impacta positivamente son hasta 3 o 4 veces más productivas. “La gente está más comprometida donde tenés un ambiente lo que se llama seguridad psicológica, donde se siente cómoda para trabajar”.
Cambio en la cultura laboral
Argentina siempre tuvo muy buenas prácticas en gestión de personas, en relación a América fue líder en la gestión e implementación de metodologías novedosas.
Actualmente México, Colombia, Brasil vienen trabajando muy bien. Perú empezó hace un tiempo a profesionalizarse mucho más.
Comentó que hoy las compañías están atravesando un cambio cultural, porque la gente cada vez es más diferente y tenemos cinco generaciones trabajando en el mismo lugar y por otro lado el impacto de la tecnología que arrasa con todo.
Manifestó que las compañías están trabajando mucho en lo que es transformación cultural, desarrollo de liderazgo que en definitiva todo ello impacta en la generación de mejor clima laboral, mejor propuesta de trabajo y mejor salario emocional.
“Se nota una preocupación y una mayor conciencia en la necesidad de cuidar a las personas, en entender que hoy el talento es lo que hace realmente la diferencia en una compañía y que cuanto más difícil es más necesitas el talento”, finalizó.
